A A. L. G.
En mi copa, tu vino.
En su borde, tu boca.
Tu aliento, en mi cuello,
buscando mis sienes
colmadas de dudas.
Mi espalda, bañada
en un mar corinto,
es ahora tu mapa.
Diseñas la ruta
en sintaxis perfecta,
mi pubis te aguarda.
Tus dedos exploran
mis labios, mis veras.
Retengo tus manos,
tangibles, seguras,
ya no son quimera,
son de carne y hueso
cuando el alba llega.
No hay comentarios:
Publicar un comentario